Vale la pena... cada espina, cada rosa, cada lágrima que riega lo que florecerá en sonrisa... porque la Vida es maravillosa por ella misma... no importan las penas, no importa el desamor... porque pasa... todo pasa y el sol vuelve a brillar...
Hay momentos que sentimos que todo está mal, que nuestras vidas se hunden en un abismo tan profundo, que no se alcanza a ver ni un pequeño resquicio, por el que pase la luz.
En esos momentos debemos tomar todo nuestro amor, nuestro coraje, nuestros sentimientos, nuestra fuerza y luchar por salir adelante.
Muchas veces nos hemos preguntado si vale la pena entusiasmarnos de nuevo, y sólo puedo contestar una cosa: Hagamos que nuestra vida valga la pena.
- Vale la pena sufrir, porque he aprendido a amar con todo el corazón.
- Vale la pena entregar todo, porque cada sonrisa y lágrima son sinceras.
- Vale la pena agachar la cabeza y bajar las manos, porque al levantarlas seré más fuerte de corazón.
- Vale la pena una lágrima, porque es el filtro de todos mis sentimientos, a través de ella me reconozco frágil y me muestro tal cual soy.
- Vale la pena cometer errores, porque me da mayor experiencia y objetividad.
- Vale la pena volver a levantar la cabeza, porque una sola mirada puede llenar ese espacio vacío.
- Vale la pena volver a sonreír, porque eso demuestra que he aprendido algo más.
- Vale la pena acordarme de todas las cosas malas que me han pasado, porque ellas forjaron lo que soy el día de hoy.
- Vale la pena voltear hacia atrás, porque así se que he dejado huella en los demás.
- Vale la pena vivir, porque cada minuto que pasa es una oportunidad de volver a empezar.
Todo esto son solo palabras, letras entrelazadas con el único fin de dar una idea.
Lo demás, depende de cada uno de nosotros. Dejemos que nuestras acciones hablen por nosotros.
Hagamos que nuestra vida valga la pena. Seamos Felices... ¿Verdad que vale la pena?
Comparto estos documentos recopilados de una gran lista, que pueden ayudarnos y sernos útiles, quiero agradecer a Daniel Rincon Prada, Graciela Aguilar, Graciela E. Prepelitchi,Mónica Uribe López, Romeo Rios, Carmen Rupérez Pérez y mucha gente que ha estado en la sombra alimentando nuevacreative con un gran aporte de historias valiosas e interesantes que nos permiten reflexionar, evolucionar y mejorar cada día un poco más.
miércoles, 30 de noviembre de 2011
La Bailarina
Una joven había tomado clases de ballet durante toda su infancia, y había llegado el momento en que se sentía lista para entregarse a la disciplina que la ayudaría a convertir su afición en profesión.
Deseaba llegar a ser la primera bailarina y quería comprobar si poseía las dotes necesarias, de manera que cuando llegó a su ciudad una gran compañía de ballet, fue a los camerinos luego de una función, y habló con el director.
Quisiera llegar a ser una gran bailarina, le dijo, pero no se si tengo el talento necesario o que me hace falta.
Dame una demostración, le dijo el maestro.
Transcurrido apenas 5 minutos, la interrumpió, moviendo la cabeza en señal de desaprobación.
No, no tiene usted condiciones.
La joven llegó a su casa con el corazón desgarrado, arrojó las zapatillas de baile en un armario y no volvió a calzarlas nunca más, se casó, tuvo hijos y cuando se hicieron un poco mayores, tomó un empleo de cajera en un supermercado.
Años después asistió a una función de ballet, y a la salida se topó con el viejo director que ya era octogenario, ella le recordó la charla que habían tenido años antes, le mostró fotografías de sus hijos y le comentó de su trabajo en el supermercado, luego agregó: Hay algo que nunca he terminado de entender.
Cómo pudo usted saber tan rápido que yo no tenía condiciones de bailarina?
Ahhh, apenas la miré cuando Ud. bailó delante de mi, le dije lo que siempre le digo a todas, le contestó.
Pero eso es imperdonable! Exclamó ella, arruinó mi vida, pude haber llegado a ser primera bailarina!
- No lo creo, repuso el viejo maestro. Si hubieras tenido las dotes necesarias, y una verdadera vocación para bailar, no habrías prestado ninguna atención a lo que yo dije
Deseaba llegar a ser la primera bailarina y quería comprobar si poseía las dotes necesarias, de manera que cuando llegó a su ciudad una gran compañía de ballet, fue a los camerinos luego de una función, y habló con el director.
Quisiera llegar a ser una gran bailarina, le dijo, pero no se si tengo el talento necesario o que me hace falta.
Dame una demostración, le dijo el maestro.
Transcurrido apenas 5 minutos, la interrumpió, moviendo la cabeza en señal de desaprobación.
No, no tiene usted condiciones.
La joven llegó a su casa con el corazón desgarrado, arrojó las zapatillas de baile en un armario y no volvió a calzarlas nunca más, se casó, tuvo hijos y cuando se hicieron un poco mayores, tomó un empleo de cajera en un supermercado.
Años después asistió a una función de ballet, y a la salida se topó con el viejo director que ya era octogenario, ella le recordó la charla que habían tenido años antes, le mostró fotografías de sus hijos y le comentó de su trabajo en el supermercado, luego agregó: Hay algo que nunca he terminado de entender.
Cómo pudo usted saber tan rápido que yo no tenía condiciones de bailarina?
Ahhh, apenas la miré cuando Ud. bailó delante de mi, le dije lo que siempre le digo a todas, le contestó.
Pero eso es imperdonable! Exclamó ella, arruinó mi vida, pude haber llegado a ser primera bailarina!
- No lo creo, repuso el viejo maestro. Si hubieras tenido las dotes necesarias, y una verdadera vocación para bailar, no habrías prestado ninguna atención a lo que yo dije
RESTRICCION
RESTRICCION
El Maestro se mostraba extraordinariamente afable con los catedráticos de universidad que acudían a visitarle, pero nunca respondía a sus preguntas ni se dejaba enredar en sus especulaciones teológicas.
A los discipulos, que se maravillaban de ello, les dijo:
"¿Puede uno hablarle del océano a una rana que habita en un pozo o hablar de lo divino a una gente que se encuentra encajonada en sus propios conceptos?
El Maestro se mostraba extraordinariamente afable con los catedráticos de universidad que acudían a visitarle, pero nunca respondía a sus preguntas ni se dejaba enredar en sus especulaciones teológicas.
A los discipulos, que se maravillaban de ello, les dijo:
"¿Puede uno hablarle del océano a una rana que habita en un pozo o hablar de lo divino a una gente que se encuentra encajonada en sus propios conceptos?
LIBERACION
LIBERACION
"¿Como puedo alcanzar la liberación?"
"Intenta descubrir quién te tiene atado", respondió el Maestro.
El discipulo regresó al cabo de una semana y dijo: "Nadir me tiene atado".
"Entonces, ¿por qué pides ser liberado?".
Este fue el momento de iluminacion para el discipulo, que de pronto quedó libre.
"¿Como puedo alcanzar la liberación?"
"Intenta descubrir quién te tiene atado", respondió el Maestro.
El discipulo regresó al cabo de una semana y dijo: "Nadir me tiene atado".
"Entonces, ¿por qué pides ser liberado?".
Este fue el momento de iluminacion para el discipulo, que de pronto quedó libre.
La sonrisa
La Sonrisa
No cuesta nada y rinde mucho.
Enriquece a quien la recibe
Sin empobrecer a quien la da.
Dura solo un instante,
Mas sus efectos duran para siempre.
Nadie es tan rico
Que de ella no precise.
Nadie es tan pobre
Que no la pueda dar.
Lleva la felicidad a todos
Y a todas partes.
Es símbolo de amistad,
De buena voluntad
Y talento para los desanimados.
Reposo para los cansados.
Rayo de sol para los tristes.
Resurrección para los desesperados.
No se compra ni se presta.
Ninguna moneda del mundo puede pagar su valor.
No hay nadie que precise tanto una sonrisa como aquel que no sabe sonreír.
Cuando Tú naciste todos sonreían, sólo Tú llorabas.
Vive de tal manera que cuando Tú mueras, todos lloren y solamente Tú sonrías.
No cuesta nada y rinde mucho.
Enriquece a quien la recibe
Sin empobrecer a quien la da.
Dura solo un instante,
Mas sus efectos duran para siempre.
Nadie es tan rico
Que de ella no precise.
Nadie es tan pobre
Que no la pueda dar.
Lleva la felicidad a todos
Y a todas partes.
Es símbolo de amistad,
De buena voluntad
Y talento para los desanimados.
Reposo para los cansados.
Rayo de sol para los tristes.
Resurrección para los desesperados.
No se compra ni se presta.
Ninguna moneda del mundo puede pagar su valor.
No hay nadie que precise tanto una sonrisa como aquel que no sabe sonreír.
Cuando Tú naciste todos sonreían, sólo Tú llorabas.
Vive de tal manera que cuando Tú mueras, todos lloren y solamente Tú sonrías.
Hoy sere feliz
Expulsaré de mi espíritu todo pensamiento triste.
Me sentiré más alegre que nunca.
No me lamentaré de nada.
Hoy agradeceré a Dios la alegría y felicidad que me regala.
Hoy trataré de ajustarme a la vida.
Aceptaré el mundo como es y procuraré encajar en el.
Si sucede algo que me desagrada, no me mortificaré, ni lamentaré: agradeceré que haya sucedido. Porque así se puso a prueba mi voluntad de ser feliz.
Hoy seré dueño de mis sentimientos, de mis nervios, de mis impulsos.
Para triunfar tengo que tener dominio de mi mismo.
Hoy trabajaré alegremente, con entusiasmo y pasión.
Haré de mi trabajo una diversión.
Comprobaré que soy capaz de trabajar con alegría.
Comprobaré mis pequeños triunfos, no pensaré en los fracasos.
Hoy seré amigable. No criticaré a nadie.
Si comienzo a criticar una persona, cambiaré la crítica por elogios; toda persona tiene sus defectos y sus virtudes.
Olvidaré los defectos y concentraré mi atención en las virtudes.
Hoy evitaré discusiones desagradables.
Hoy voy a eliminar dos plagas: la prisa y la indecisión.
Hoy viviré con calma, con paciencia, porque la prisa es la enemiga de una vida feliz y triunfante.
No permitiré que la prisa me acose ni que la impaciencia me abrume.
Hoy tendré confianza en mi mismo.
Y mañana haré otro día como hoy
Me sentiré más alegre que nunca.
No me lamentaré de nada.
Hoy agradeceré a Dios la alegría y felicidad que me regala.
Hoy trataré de ajustarme a la vida.
Aceptaré el mundo como es y procuraré encajar en el.
Si sucede algo que me desagrada, no me mortificaré, ni lamentaré: agradeceré que haya sucedido. Porque así se puso a prueba mi voluntad de ser feliz.
Hoy seré dueño de mis sentimientos, de mis nervios, de mis impulsos.
Para triunfar tengo que tener dominio de mi mismo.
Hoy trabajaré alegremente, con entusiasmo y pasión.
Haré de mi trabajo una diversión.
Comprobaré que soy capaz de trabajar con alegría.
Comprobaré mis pequeños triunfos, no pensaré en los fracasos.
Hoy seré amigable. No criticaré a nadie.
Si comienzo a criticar una persona, cambiaré la crítica por elogios; toda persona tiene sus defectos y sus virtudes.
Olvidaré los defectos y concentraré mi atención en las virtudes.
Hoy evitaré discusiones desagradables.
Hoy voy a eliminar dos plagas: la prisa y la indecisión.
Hoy viviré con calma, con paciencia, porque la prisa es la enemiga de una vida feliz y triunfante.
No permitiré que la prisa me acose ni que la impaciencia me abrume.
Hoy tendré confianza en mi mismo.
Y mañana haré otro día como hoy
jueves, 10 de noviembre de 2011
Acompañar
Simplemente estar ahí, presente, al lado de quien te necesita.
No es indispensable hablar, ni hacer algo especial.
Lo importante es comunicar al otro que uno está unido con la alegría, o la tristeza; que está viviendo el ser querido.
Lo que vale es respetar siempre el pedido, verbal o silencioso, latente o manifiesto de compañía o de soledad.
Acompañar es intuir la carencia del otro: es cuidar, proteger, sin molestar o dañar.
Es tarea de amigos, de amantes, de seres que se sostienen en la hermandad de los afectos.
Es un servicio de lealtad.
Es un punto de contacto, más cerca de los sentimientos invisibles que de la mera proximidad física, ostensible.
Se puede estar "cerca" de alguien.
También es posible estar unidos por la distancia, pero próximos en el corazón.
A veces los sentimientos se filtran, por las fronteras inventadas por los mismos protagonistas.
Acompañar no es pared sino puente, unión de almas.
Existen paredes de vidrio, no visibles, que impiden la unidad de los sentimientos, que asfixian el surgimiento generoso y espontáneo de la compasión.
Hay proximidades que agobian y aíslan mucho más que la soledad misma.
¿"Y qué le digo"?, preguntó alguien, temeroso de sus propias emociones ante el dolor de un conocido...
"No digas nada, absolutamente nada", respondió la sensibilidad.
Lo que importa es estar ahí en el momento justo.
Tal vez no exista nada mejor que la elocuencia del silencio.
En determinadas circunstancias, las palabras sólo consiguen incomunicar.
Como se recuerda el sabor del vino aún después que su olor se haya desvanecido, y que su copa haya desaparecido.
"Cállate por favor... quiero estar contigo", suplicó el poeta necesitado de compañía...
No es indispensable hablar, ni hacer algo especial.
Lo importante es comunicar al otro que uno está unido con la alegría, o la tristeza; que está viviendo el ser querido.
Lo que vale es respetar siempre el pedido, verbal o silencioso, latente o manifiesto de compañía o de soledad.
Acompañar es intuir la carencia del otro: es cuidar, proteger, sin molestar o dañar.
Es tarea de amigos, de amantes, de seres que se sostienen en la hermandad de los afectos.
Es un servicio de lealtad.
Es un punto de contacto, más cerca de los sentimientos invisibles que de la mera proximidad física, ostensible.
Se puede estar "cerca" de alguien.
También es posible estar unidos por la distancia, pero próximos en el corazón.
A veces los sentimientos se filtran, por las fronteras inventadas por los mismos protagonistas.
Acompañar no es pared sino puente, unión de almas.
Existen paredes de vidrio, no visibles, que impiden la unidad de los sentimientos, que asfixian el surgimiento generoso y espontáneo de la compasión.
Hay proximidades que agobian y aíslan mucho más que la soledad misma.
¿"Y qué le digo"?, preguntó alguien, temeroso de sus propias emociones ante el dolor de un conocido...
"No digas nada, absolutamente nada", respondió la sensibilidad.
Lo que importa es estar ahí en el momento justo.
Tal vez no exista nada mejor que la elocuencia del silencio.
En determinadas circunstancias, las palabras sólo consiguen incomunicar.
Como se recuerda el sabor del vino aún después que su olor se haya desvanecido, y que su copa haya desaparecido.
"Cállate por favor... quiero estar contigo", suplicó el poeta necesitado de compañía...
Muchas veces me pregunto…
Muchas veces me pregunto…. ¿por qué la gente pelea?
¿Realmente importará quién está en lo correcto o quién estará equivocado?
Me pregunto…
¿No están simplemente satisfaciendo su ego mientras discuten con sus llamados "enemigos"?
Me pregunto, si la vida es tan larga, ¿no será el poder del amor más fuerte?
Muchas veces, me pregunto…
¿Cómo pueden cosas tontas como el ego dominar al amor?
¿Dónde está el mensajero de paz, la hermosa paloma?
Me pregunto, me pregunto…
La gente encuentra excusas para arruinar sus propias vidas, resulta tan extraño que aún el amor puede convertirse en razón para sacar cuchillos, celos, odios, diplomacia.
¿Son éstas las palabras que enloquecen al hombre?
O… ¿será el hambre de obtener más?
¿No seremos nada mejor que acumuladores de cosas?
Realmente, me pregunto…
Esto hace que mi corazón se duela, cuando las nubes de la guerra traen vidas que se extinguen.
La única necesidad del día es amor.
Lo que necesitamos es amor.
Lo que queremos extender es amor.
Lo que queremos recoger es amor.
El amor… ¡el secreto de la vida!
Amor, una palabra pequeña pero con un significado muy grande.
El Amor es el secreto de la Vida.
Todos tenemos hambre de amor, aunque algunos lo oculten.
¿Realmente importará quién está en lo correcto o quién estará equivocado?
Me pregunto…
¿No están simplemente satisfaciendo su ego mientras discuten con sus llamados "enemigos"?
Me pregunto, si la vida es tan larga, ¿no será el poder del amor más fuerte?
Muchas veces, me pregunto…
¿Cómo pueden cosas tontas como el ego dominar al amor?
¿Dónde está el mensajero de paz, la hermosa paloma?
Me pregunto, me pregunto…
La gente encuentra excusas para arruinar sus propias vidas, resulta tan extraño que aún el amor puede convertirse en razón para sacar cuchillos, celos, odios, diplomacia.
¿Son éstas las palabras que enloquecen al hombre?
O… ¿será el hambre de obtener más?
¿No seremos nada mejor que acumuladores de cosas?
Realmente, me pregunto…
Esto hace que mi corazón se duela, cuando las nubes de la guerra traen vidas que se extinguen.
La única necesidad del día es amor.
Lo que necesitamos es amor.
Lo que queremos extender es amor.
Lo que queremos recoger es amor.
El amor… ¡el secreto de la vida!
Amor, una palabra pequeña pero con un significado muy grande.
El Amor es el secreto de la Vida.
Todos tenemos hambre de amor, aunque algunos lo oculten.
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