Algunas veces por no correr riesgos dejamos pasar muchas cosas y todo porque ese día tenemos pereza, o no tenemos tiempo…
HOY...No dejemos pasar las oportunidades que nos concede la vida...
¿Quién no llora de emoción, cuando descubre que alguien con alguna limitación alcanza cosas más grandes que aquellos a quién aparentemente nada les falta...?
Cuando se piensa que se tiene todo, se limitan los sueños, se acaba el sentimiento de búsqueda, nada se espera, se estancan las ilusiones, se adormece el ser.
Por eso no es para llorar cuando alguien va zigzagueando en su andar; pero lo intenta.
Es para llorar cuando alguien deja de andar por pereza o falta constancia y anda por los caminos divagando... sintiéndose limitado.
No hay comentarios:
Publicar un comentario